Pósate en mi monte y olvida mi corporeidad, húndete en mis fibras; abraza la blandura de mi cuerpo, inúndame de versos amatorios, asfíxiame con tus deseos reprimidos, y libérame en el recuerdo desterrado, déjame a mí la osadía de alejarme en sueños inconclusos, en amoríos no consumados, déjame a mí la arrogancia de despedirme en el silencio, déjame a mí la culpa de los dolores y privaciones, entrégame el último roce naciente, el aliento agitado de tu boca y abandona una vez más mi monte desnudo que está fatigado de tus encuentros furtivos
Comando actualidad con Adrián Pérez.
Hace 9 años